Desde Aristóteles, los preceptores elevan las mentes hasta las cumbres. Otium continúa el sendero.
El preceptorado encuentra sus orígenes en el corazón de la Grecia y la Roma antiguas — donde la relación entre maestro y discípulo fundaba no solo el aprendizaje sino también la ascensión. Figura tutelar, el preceptor encarnaba el arte de la transmisión.
ɸ En Atenas, Aristóteles, preceptor de Alejandro, no se contentaba con enseñar un corpus de conocimientos, forjaba un destino;
ɸ en Roma, el grammaticus preparaba a los hombres para mantener su rango en la ciudad, por la palabra, la ética y el estilo.
En OTIUM, el preceptorado se erige sobre dos pilares cardinales:
ɸ I. — Excelencia — Académica, intelectual o profesional.
ɸ II. — Libertad — Cada Praeceptor dispensa soberanamente su Saber.
Para encarnar esta vocación exigente, se confieren Privilegios a los Praeceptor:
ɸ Libertad de transmisión
Cada Praeceptor determina su línea editorial y las condiciones de acceso a sus enseñanzas, en total Libertad, ya sea gratuitamente o con retribución.
ɸ Santuario editorial
Una Academia forjada a su imagen, marco de sus Lectio y Adventus.
ɸ Exigencia de excelencia
Sus enseñanzas se dirigen a un auditorio cultivado, exigente y comprometido.
ɸ Apoyo y asistencia
Otium Exedra orquesta con usted la puesta en forma de sus enseñanzas.
El preceptorado exige más que un saber. Requiere una disposición interior; una fidelidad a sus propios murmullos altivos. Comprometerse en él es proseguir el sendero de su propia ascensión. Es reconocer, a través de la itinerancia cumplida, una frecuentación de las altas cumbres para extraer su singularidad.
La función de Praeceptor está abierta a aquellas y aquellos cuyo recorrido testimonia una excelencia en la transmisión, la reflexión o la dirección intelectual — profesores, maestros de conferencias, agregados o investigadores.
El expediente de candidatura se compone de los siguientes elementos, a adjuntar a su envío:
ɸ α. un curriculum vitae;
ɸ β. tres publicaciones recientes — en su caso — libremente elegidas;
ɸ γ. el tema previsto para su primera Lectio, acompañado de una breve descripción; así como
ɸ δ. una figura tutelar o una cita que le acompañe.
Cada candidatura se considera con una atención singular. Esta etapa tiene por objeto discernir una afinidad entre la Casa y aquel o aquella que se compromete. Las etapas se descomponen de la siguiente manera:
ɸ α. transmisión del expediente de candidatura;
ɸ β. lectura confidencial por el Comité editorial OTIUM;
ɸ γ. en su caso, podrá proponerse un diálogo con uno de los miembros del Comité; y finalmente
ɸ δ. en caso de designación: entrega de un código de acceso único que otorga el derecho a fundar su propia Academia.
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